Mi opinión:

Bueno, la premisa no dista mucho de la anterior, una vez más Nora se encuentra ante un peligro inminente, solo que esta vez puede que Patch no sea capaz de ayudarla (o eso nos hace creer la autora). 

"Me había asustado tanto lo que se avecinaba que había preferido ignorar lo inevitable"

Crescendo comienza contándonos un poco sobre como esta la relación entre el ángel caído, ahora custodio, y Nora. Un poco de besuqueos, romance y coqueteo que terminan en palabras de amor dichas por la protagonista y... tras esto todo se va al traste.

"La rabia empezaba a ceder, pero casi hubiese deseado que su ardor no me abandonara nunca. El vacío que dejaba a su paso me dolía más que la rabia que había sentido cuando se marchó".

Luego de su confesión amorosa, Nora se percata de que Patch esta cada vez má distante que ella. Por lo que el hecho de que tal vez él no sienta lo mismo que ella la vuelve loca a sobre manera. Si estas dudas no fueran pocas, Patch se encarga de aumentarlas al comenzar a relacionarse con Marcie. Debo confesar que Patch me pareció todo un imbécil en este libro, de todas las chicas que pudo haber elegido tenía que irse con la que más peleaba Nora, ¿de verdad? Como sea, en lugar de andar llorando, Nora le hubiera dado una patada a Patch. Y llegados a este punto, creo que esta es una relación bastante dependiente, quiero decir que Nora no puede imaginar una vida sin patch y hace de todo con tal de tenerlo checadito a pesar de haber roto. WTF? Reacciona, tonta! Pero claro, no todo es culpa del Ángel buenisimo, sino de los arcángeles, que tienen ojos y alas sobre él con tal de hacer que se aleje de Nora. 

"¿Estas loco?"

"Loco por ti."

Tras su ruptura con Patch, Nora hace nuevos amigos. Aquí entra Scott, un viejo conocido que llega a su vida para darle más emociones fuertes de las ya acostumbradas. Temprano, Nora se da cuenta de que Scott no es tan normal como intenta aparentar ni como lo recordaba. Al igual que ella, el chico es un Nefilim, pero no uno de los buenos, o al menos eso piensa ella. Al mismo tiempo que Scott llega a la ciudad, Nora comienza a experimentar visiones sobre su padre muerto, él la llama y le pide que se reúna con él, pero hay algo en la voz del hombre que no logra convencer del todo a Nora y decide mantener sus distancias del hombre con el rostro de su padre. Regresando a Scott... otro imbécil. Ahora si que es mucho más apreciable la violencia de género, en este caso de Scott a Nora; y no solo verbal sino también físicamente. Sin embargo, llegados al final esta violencia es sustentada pero a pesar de ello creo que se ha pasado un poquitin la autora queriendo remediar las cosas con un coche. Quiero decir, me maltratas, me cuentas tus razones, te perdono y luego somos amigos porque me regalaste un coche. Esta para pensarlo, ¿no? Pero bueno, no olvidemos que al pobre de Scott también lo tenían aterrorizado. 

"Es el típico chico malo que necesita que lo salven, pero la cuestión es que la mayoría de los chicos malos no quieren que los salven. Les gusta ser malos".  

Tras una ardua investigación que realiza Nora para saber porqué mira a su padre y porque parece estar corriendo de otro posible asesino, se dá cuenta que sus sospechas han ido en la dirección equivocada. El que está tras ella no es quien ella creía y esa equivocaci´pon podría costarle al vida. 

"Desenterrarlo no va a cambiar el pasado... te hará revivirlo".

La historia dio varios giros interesantes y mantuvo la emoción en más de una ocasión, es por eso que me ha gustado más que el primer libro. 

"A lo mejor mi mente me hacía ver cosas que yo me negaba a aceptar que había perdido para siempre. Estaban llenado el vacío porque eso era más fácil que dejarlas marchar".

Si algo debo criticar es la estupidez de la protagonista. ¿En verdad es posible que alguien se deje humillar tantas veces y por tantas personas distintas como lo hace Nora en este libro? Creí que el personaje tendría alguna evolución pero no. Su carácter se reduce a pura autocompasión. Además, cada vez le encuentro más parecido con Crépusculo: una protagonista insulsa, con baja autoestima que esta en peligro una y otra vez (y si no está ella misma se pone en peligro) con tal de tener al chico no humano cuidando las espaldas. Buh, más de lo mismo. Queremos protagonistas autosuficientes, gracias. 

"¿A dónde nos lleva esto?"

"A estar juntos"

"Nos peleamos mucho".

"También nos reconciliamos muchas veces".

Si no fuera por la emoción que se vive y los giros de la historia la calificación sería más baja. Por lo que a pesar de que me ha gustado más que el primero les dejo la misma calificación porque tampoco se merece un cuatro. Quizá un 3.5/5

Calificación:

Reacción:

Eso es todo por ahora. Cambio y fuera. Nos leemos pronto.